Materia

10 de Noviembre, 2018

Hay una filosofía recurrente en muchos de mis proyectos que llamo “plastilina digital”: poner en manos de otras personas “juguetes” que sean divertidos de usar y sirvan para construir cosas.

Se me ocurrió plasmar este concepto en un pequeño prototipo, con una especie de substancia que se pudiera usar para dibujar o lo que sea.

La experiencia es algo parecido a dibujar con las gotitas de agua en un cristal después de un día de lluvia.

En dispositivos móviles es especialmente satisfactorio manipularlo directamente con los dedos.